Entre ellos Sergio Barenghi el Jefe Comunal de Bragado.
Todo el peronismo provincial se reunido en la gobernación para discutir una estrategia unificada ante el gobierno de Javier Milei, en un encuentro comandado por Axel Kicillof en la sede de la gobernación bonaerense.
“Es un encuentro para ordenarnos, y claro que tiene un peso que Kicillof sea al anfitrión”, resumió a DIB Hugo Yasky, el gremialista de CTA y diputado del Frente de Todos el sentido del encuentro, que se realiza a puertas cerradas en el salón dorado de la gobernación provincial.
Un punto clave fue el diagnóstico: Kicillof dijo que se trata de un plan de ajuste clásico, con tres renglones: apretón monetario, apretón fiscal y devaluación. “Lo único nuevo es que es sin anestesia, es más profundo, más rápido y sin ninguna medida que contrarreste los efectos que tiene”, sintentizó el mandatario.
Sergio Massa, por su parte, aportó una clarificación: “lo primero que tenemos que saber es que el ajuste no comenzó con el DNU, sino con un impuestazo. Los grandes perdedores de las primeras medidas son los jubilados, porque cae el bono y suspenden la fórmula; en segundo lugar las universidades, que van con el presupuesto 2023, en abril no tienen más presupuesto”.
Kicillof enfatizó la dimensión de “estafa electoral” del plan e indicó que “la proyección de inflación es una incógnita. Hay muchos puntos que no se saben, porque –confirmó- en la reunión con Milei, no respondió a nada”.
El gobernador recordó que se trata de “la devaluación más grande de la historia de las devaluaciones producidas por el Estado. Hay que dirigir el descontento a su verdadera fuente. Es un trabajo político al que no podemos llegar tarde”.
En ese marco, agregó un dato clave: contó, al hacer un repaso de los recursos bonaerenses, que Milei le dijo que “está de acuerdo con que la coparticipación es injusta con la PBA, que está dispuesta a discutirla, pero que es un problema estructural y que ahora no hay plata”.
El gobernador enfatizó de todos modos que “no tenemos idea de qué va a pasar con los recursos que recibimos de Nación ni con la obra pública”. Durante la reunión Kicillof reclamó por los recursos que la provincia necesita. “El problema es cuánto del ajuste quieren que lo paguen las provincias”, sintetizó.
DNU, protestas y congreso
Hubo una coincidencia generalizada en que se van acompañar todas las acciones y que se aceptan “todas las ideas, sugerencias, críticas, propuestas” para oponerse al DNU. Sobre esa herramienta, Kicillof fue claro: “forma parte de un paquete mucho más grande que busca liberalizar todo lo que no afecte a los grupos económicos que apoyen a Milei”.
“Tenemos un programa neoliberal funcionando, no es la primera vez pero probablemente sea uno de los peores”, dijo.
La cristinista Juliana Di Tullio, una de las espadas importantes del peroniosmo en Diputados, dijo que hoy el número está para rechazar el decreto, “pero de acá a 30 días hábiles es imposible saber”.
Máximo Kirchner se expresó a través de una serie de mensajes en las redes del PJ bonaerense. “El decreto inconstitucional del presidente Milei anunciado el 20 de diciembre pretende desregular ya no la economía sino la vida entera de nuestra gente y es apoyado por los grandes empresarios y el mercado”, fue el más sustancioso de ellos.