Este domingo en el estadio Guillermo Laborde, Bragado Club y Villa Tranquila volverán a verse las caras en el partido revancha de la final de la Liga Bragadense. Bragado Club ganó 1 a 0 con gol de Marcial Paredes. Incluso en el instante final del encuentro, el arquero local atajó un penal que hubiera dejado el terreno más encaminado para Bragado Club. Pero el destino no quiso y la final empieza con una diferencia mínima que adelanta un partido abierto que puede ser para el que ese día esté mejor.
En la previa, vale la pena repasar el juego del pasado domingo. Para el director técnico de Bragado Club, Diego Herrera, fue “una primera linda final, muy pareja y muy dura, se vio un espectáculo de mucha gente de ambos lados. A pesar de las dimensiones chicas de la cancha, ambos equipos intentaron llegar al arco rival. Tuvimos la suerte de ganar 1 a 0 y de venirnos con un triunfo importante, que no es definitorio porque queda otro partido durísimo, donde ellos van a dar pelea y nosotros vamos a defender ese resultado. Y nosotros no nos vamos a quedar solamente en eso, vamos a estar jugando en nuestra cancha y vamos a querer dar el mejor espectáculo”.
En cuanto a los aspectos del equipo que más los conformaron, Herrera destacó “el compromiso táctico”. En una cancha pequeña, de visitante, donde sabíamos que nos iban a atacar para tener una ventaja, el equipo estuvo sólido. Pasamos apuros, porque es una final y el rival juega, pero respondimos. Esa solidez es lo que más me gustó”, concluyó.
Por su parte, para Walter Olearo, técnico villero, “el partido se jugó como una final, ambos equipos lo jugaron así. Para mi forma de ver el fútbol llegaron los dos equipos que mejor tratan la pelota, que mejor juegan. Salió lindo, aunque la cancha es chica. A pesar de todo creo que fuimos superiores en buena parte del partido, creamos cinco situaciones de gol realmente claras, no tuvimos suerte y un poco de ineficacia en la definición. Estos rivales son así, tienen mucha historia, muchas finales jugadas, están acostumbrados a jugar este tipo de partidos. Nos crearon una jugada de pelota parada en el primer tiempo y en el segundo tiempo, nos meten dos cabezazos en el área y se encontraron con un gol”.
Aunque no quedó conforme con el resultado y considera que el resultado fue “injusto” sabe que en estos partidos no valen los merecimientos. “Vamos a tener que ir allá a hacer lo que siempre hicimos, en ese sentido estamos tranquilos, porque siempre jugamos de la misma forma en todos lados. Lo vamos a ir a buscar, sabemos que es difícil pero no imposible. Tenemos mucha fe, mucha confianza de hacer nuestro trabajo, además de generar situaciones de gol, convertir y abrir el partido rápido”.
Para concluir, Olearo agrega que el penal atajado por Bernabei a Federico Lousa en el final del partido “fue un golpe de inyección anímica para todo el grupo. Estamos bien, estamos preparados”. La mesa está servida, este domingo desde las 15 hs en Bragado Club habrá un campeón y nada parece estar definido de antemano.