En la última reunión de la Liga Bragadense de Fútbol se resolvió suspender el Torneo de Ascenso.
Luego de esa decisión se supo que mediante una dura nota, el vicepresidente Sebastián Perez renunció de manera indeclinable a su cargo.
LA DURA NOTA DIRIGIDA A YAFFALDANO
Tengo el agrado de dirigirme a Ud. a fin de presentarle mi formal e indeclinable renuncia a la Vicepresidencia de la Liga Bragadense de Fútbol.
Motiva esta decisión los últimos acontecimientos donde desde la Liga ha perdido la brújula.
Desde el año pasado a éste, se han dado de baja Cinco instituciones que no pueden afrontar los cuantiosos gastos para participar en el torneo organizado por la Liga.
Desde ese momento, no se ha generado ninguna reunión con la Dirección de Deportes ó Área que se haya designado a tal efecto.
No se ha dado una reunión con los clubes, para en un ambiente más íntimo puedan informar el porqué de su baja. Lo que yo veo como una derrota total de la gestión, algunos – evidentemente – lo ven como una victoria.
Sumado a esto, en la última reunión de Delegados cuando abiertamente pregunté si íbamos a mantener el reglamento del Ascenso como el año pasado y años anteriores, indicaron que no.
Sólo medió una explicación matemática respecto a cómo se organiza el torneo, pero ningún tipo de motivo reglamentario.
Esto, en términos futbolísticos, es correr el arco de lugar. Como profesional del derecho y como amante de las leyes no me puedo permitir estar dentro de una institución donde discrecionalmente se modifica un reglamento.
Mi misión en la Liga fue la de aportar ayuda en la comunicación, gestionar reuniones con la administración pública e intentar enriquecer el estado de situación jurídica de la Liga. Algo de eso he podido hacer, otras cosas han quedado en el tintero.
Resulta una gestión imposible ordenar un lugar donde ya todo está resuelto previamente por amistades que vienen desde años y las reuniones eran, son y serán únicamente un momento para organizar un fixture.
Agradezco la oportunidad a los clubes que me votaron para ejercer tamaña responsabilidad, pero hoy es mi último día.
Sin más, saluda atentamente.
Sebastián Eduardo Perez